Parábola de la esperanza
PARÁBOLAS DE LA ESPERANZA: Si la historia me da una lección, me gusta aún más; Encuentro que a menudo cuando veo un principio en el Nuevo Testamento ilustrado por la vida de una persona en el Antiguo Testamento.
Ambos tienen más sentido. Jesús fue un maestro narrador. Sus parábolas enseñaron la verdad de una manera que la gente de la cultura oriental de Su época podía entender, y con la que nosotros en Occidente también podemos relacionarnos. Las parábolas son historias ambientadas en un contexto terrenal que enseñan la verdad espiritual. Los disfrutamos porque involucran tanto nuestros pensamientos como nuestros sentimientos. Las parábolas no son la fuente de nuestra doctrina, pero pueden ilustrar la verdad doctrinal. Para el buscador de la verdad, estimulan el deseo de una comprensión más profunda. Para el que rechaza la verdad, ocultan la verdad y, por lo tanto, algunos creen, disminuyen hasta cierto punto su responsabilidad.
Parábola de la esperanza
Los tres capítulos y parábolas que estamos estudiando esta semana son casi totalmente exclusivos de Lucas. DÍA UNO: La parábola del gran banquete. Lucas 14: 1-24 A. La invitación de Jesús a cenar en la casa de un fariseo prominente en sábado dio lugar a que se enseñaran tres lecciones. El primero estaba relacionado con una trampa que le habían tendido. Conociendo la compasión de Jesús, ¡no tenían ninguna duda de que lo atraparían! Lea los versículos 1-6. El cebo para la trampa fue un hombre que sufría síntomas de lo que pudo haber sido una enfermedad cardíaca o renal en etapa terminal. De hecho, tanto Jesús como los fariseos estaban siendo juzgados. ¿Cuál de ellos mostró compasión? ¿Qué valoraban realmente los fariseos? ¿Cómo revelaron las preguntas de Jesús su hipocresía? ¿Qué lección ves? B. Cuando llegó la hora de comer, los invitados se sentaron.
En esa cultura, la cercanía al anfitrión indica la importancia de uno. Lea las observaciones de Jesús en los versículos 7-14. Jesús no defiende una falsa humildad, sino una verdadera humildad en sus consejos a los invitados. (versículos 8-11) Jesús también tuvo un consejo para el anfitrión en los versículos 12-14. Jesús no está diciendo que no puedas invitar a tus amigos a cenar, pero no deberían ser los únicos. ¿Cómo es posible que invitar a los necesitados produzca verdadera humildad en el anfitrión? La verdadera hospitalidad no busca recompensa. Tal vez, como yo, ha encontrado gozo al ofrecer hospitalidad a los extraños. Particularmente cuando nos alejamos de la familia y los amigos, en lugar de lamentar la pérdida de relaciones y tradiciones, qué placer es crear otras nuevas, especialmente cuando se incluyen personas que no tienen la capacidad de corresponder.
¡Esa es una verdadera bendición!
Esto provocó una respuesta piadosa por parte de una persona que asumió que sería incluido en el reino en la fiesta con Abraham. Jesús lo usó para enseñar una lección espiritual. En ese día, alguien que planeaba dar un banquete invitaba a los invitados con anticipación y les daba la fecha. Cuando se acercaba el tiempo, enviaba a sus sirvientes a los invitados y les daba la hora específica.
Esto no es diferente a la forma en que algunas personas envían notas pidiendo a sus amigos que guarden la fecha de su boda. En este caso, las personas de la parábola habían acordado asistir al banquete, pero cuando los sirvientes llegaron con los detalles de la invitación, cambiaron de opinión y dieron muchas excusas. Al leer esta parábola en los versículos 16-24, considere que el “cierto hombre” en el versículo 16 es Dios y los invitados que fueron invitados con anticipación son los judíos. La gente del versículo 21 podría ser la “perdida” que Jesús vino a buscar ya salvar, siendo los gentiles los que estaban en los caminos y senderos rurales del versículo 23. ¿Cómo revela esta parábola la compasión de Dios por todas las personas, judíos y gentiles? Aunque muchos están invitados, llegará un día en el que será demasiado tarde para responder. ¿Qué urgencia pone esto en ti como invitado? … como sirviente extendiendo invitaciones? SEGUNDO DÍA: Parábolas del discipulado.
Lucas 14: 25-35
Parábola de la esperanza, Recordando que Jesús estaba en camino a Jerusalén y la cruz, este pasaje tiene un peso adicional. Aunque todavía lo seguían grandes multitudes, ¿cuáles crees que fueron sus motivos? La palabra “odio” en el versículo 26 no es una palabra de emoción sino de comparación. El amor de uno por Jesús debe ser mayor que el amor de uno por la familia o incluso por la propia vida. ¿Qué significa “llevar la cruz de uno”? (Esto no se refiere a enfermedades u otros problemas que enfrentamos porque vivimos en un mundo caído. Vea II Timoteo 1: 8). B.
Jesús da tres parábolas sobre por qué el costo del discipulado es tan alto. Explique los versículos 28-30. ¿Cómo has hecho esto? Hay dos formas de interpretar la parábola de los versículos 31-33. El primero nos relaciona con el rey. Otra interpretación dice que el rey es Jesús y nosotros sus soldados. Después de leer estos versículos detenidamente, ¿cuál tiene más sentido para ti? Independientemente de la interpretación que prefiera, ¿cuáles son las implicaciones para usted personalmente? La tercera parábola en los versículos 34-35 se relaciona con la calidad de vida del discípulo. Nombra 3-4 características o usos de la sal. Espiritualizando esto, ¿cuáles de estos rasgos son verdaderos para ti? C. Nosotros, en Occidente, de alguna manera pensamos que deberíamos estar exentos de pagar un precio por seguir a Jesús. Considerando cuántas veces Jesús enfatiza un costo, ¿no deberíamos tomar esto en serio?
Recuerde también Lucas 9: 23-26; 57-62